Nuestros libros están planificados secuencialmente ahorran esfuerzos al profesor y son más productivos porque el niño y la niña se convierte en autor de su aprendizaje a través de los libros. El maestro es guía, facilitador, incentivador.

Los niños y las niñas aprenden formas y técnicas de estudio y trabajo científico sin necesidad de dedicar horas o días a estudiar específicamente métodos y técnicas que podrán conocerlas, si el caso requiere, acudiendo a libros y otras fuentes.

La labor del maestro indiscutible en le proceso educativo, permitirá convertir nuestros libros de trabajo en herramientas alternativas eficientes y productivas, dinámicas, motivadoras y económicas.

Los libros de trabajo son baratos, si comparamos y tomamos en cuenta el valor del tiempo que el maestro y niño y niña dedican a dictar y copiar materiales en los cuadernos tradicionales.